Ilustración realizada por un artista palestino para pedir la libertad para Jalil. Su situación ha conmovido a todos aquellos que la han conocido. | Redacción Digital
Al borde de la muerte y apurando sus últimas fuerzas, hoy Jalil Awawdeh vuelve a sonreír. A duras penas, pues los daños físicos y mentales de 182 días de huelga de hambre son severos. Este hombre palestino de 40 años de edad ha roto su ayuno decidido y voluntario, iniciado para denunciar a ojos de la comunidad internacional la injusticia que han hecho con él, en detención administrativa en una cárcel de Israel sin conocer de qué se le acusa, ni cuáles son las evidencias en su contra e incluso carecer de fecha para ser juzgado. Hoy Jalil ha recibido el compromiso de las autoridades israelíes de que en poco tiempo van a poner fin a su cautiverio.
1 comentario
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
Ayuno intermitente 6-6. Medio año sí, medio año no.