Un joven murió a causa de sus heridas el jueves por la mañana como resultado de la operación israelí en la ciudad del norte de Cisjordania que comenzó esta semana, dijo el Ministerio de Salud palestino. Otros dos palestinos murieron durante la noche, añadió. Las fuerzas israelíes han registrado cientos de recintos e interrogado a cientos de sospechosos desde que comenzó la operación el 12 de diciembre, informó el ejército en un comunicado. También desmantelaron seis laboratorios de explosivos, túneles subterráneos y artefactos explosivos.
Desde el inicio de la redada en la mañana del 12 de diciembre, las fuerzas israelíes han detenido a cientos de ciudadanos, la mayoría de los cuales han sido puestos en libertad, según un comunicado el Club de Prisioneros Palestinos, un grupo de defensa de los derechos humanos. Israel no permitía que las ambulancias entraran en el campamento para trasladar a los pacientes, dijo a Reuters Mahmoud Al-Saadi, director de la Media Luna Roja Palestina en Yenín.
«Tenemos seis ambulancias, pero ni siquiera podemos llegar a los pacientes que necesitan ser transportados al hospital, algunos de los cuales necesitan diálisis», aseguró Al-Saadi. «El ejército no nos permitió entrar», a pesar de los intentos de coordinación con la Cruz Roja y la agencia palestina de ayuda de la ONU, dijo, y añadió que también había soldados apostados fuera del Hospital Gubernamental de Yenín. Cuatro soldados resultaron heridos leves por explosiones controladas y disparos de las propias fuerzas israelíes, según el comunicado militar.
Los soldados ocuparon una mezquita donde se oían disparos esporádicos a lo lejos, según mostró un video que circulaba por redes sociales. Preguntado por las muertes de palestinos y por los informes de que los soldados habían impedido que las ambulancias llegaran a los enfermos, el ejército confirmó la «actividad antiterrorista en curso» en la ciudad y dijo que se proporcionarían más detalles una vez finalizada la actividad. Antes de la última operación, el Ministerio de Salud palestino informó que 275 palestinos habían muerto en Cisjordania desde el ataque perpetrado el 7 de octubre desde Gaza contra el sur de Israel por el movimiento islamista Hamás, en el que murieron unos 1.200 israelíes.
El creciente número de víctimas mortales de la violencia en Cisjordania, que ha incluido una oleada de ataques de colonos israelíes contra habitantes palestinos, ha puesto de relieve el temor a que el territorio arrebatado por Israel en una guerra de 1967 se descontrole a medida que avanza el bombardeo israelí contra el enclave palestino separado de Gaza.
El derramamiento de sangre se había agravado en Cisjordania incluso antes de que estallara la guerra en Gaza, gobernada por Hamás. Los palestinos quieren que Cisjordania sea el núcleo de un Estado independiente. En los últimos años, Israel ha ampliado enormemente los asentamientos judíos allí, que la mayoría de los países consideran ilegales. Israel lo niega y aduce vínculos históricos y bíblicos con la tierra.
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