Trabajadores en Estados Unidos se concentran por Gaza. | Reuters - JOHN G. MABANGLO

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El anuncio de Colombia de romper relaciones con Israel por el «genocidio» de civiles palestinos en Gaza y las escenas de detenciones masivas de estudiantes en Estados Unidos han marcado la escena internacional en las últimas horas. De un lado el presidente colombiano, Gustavo Petro, ha respondido al ministro de Exteriores de Israel, Israel Katz, quien había asegurado que el mandatario sudamericano será recordado por «ponerse del lado de los monstruos más despreciables».

Según Petro, el «monstruo» es el «genocidio» perpetrado por el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu. «El monstruo es el genocidio y Yetanhau -refiriéndose al gobernante israelí- produce el genocidio del pueblo palestino», ha publicado Petro en su cuenta de la red social X, en reacción a las palabras de Katz. Para el actual ocupante de la Casa de Nariño, la ruptura de relaciones diplomáticas con Israel es una represalia ajustada a las consecuencias de la ofensiva del Ejército israelí contra la Franja de Gaza, donde han muerto ya más de 34.500 palestinos en su intento por acabar con los milicianos islamistas de Hamás y Yihad islámica, y recuperar a los civiles israelíes que aun permanecen en cautiverio.

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Por su parte, el representante de la diplomacia del Estado judío ha criticado al presidente colombiano por «ponerse del lado de los monstruos más despreciables», en alusión al Movimiento de Resistencia Islámica, que según el israelí son conocidos por «quemar bebés, asesinar niños, violar a mujeres y secuestrar a civiles inocentes». El mandatario colombiano ya había amenazado con la ruptura de los lazos diplomáticos si Israel no acataba la resolución aprobada por el Consejo de Seguridad de la ONU que pedía un alto el fuego «inmediato» durante el mes de Ramadán.

Estados Unidos, que ejerció su derecho de veto en hasta tres ocasiones, dio 'luz verde' al texto el pasado 25 de marzo. Petro se ha mostrado muy activo desde el pasado 7 de octubre, cuando las milicias palestinas atacaron Israel, lo que se saldó con 1.200 muertos y 240 rehenes. De hecho, el presidente colombiano planteó en enero una comisión de paz para avanzar hacia un cese de las hostilidades e iniciar nuevas conversaciones para la liberación de los secuestrados que permanecen en Gaza.