La noticia de las detenciones se produjo cuando estaba en marcha una operación policial de 450 efectivos para desmantelar el grupo, bautizado por los fiscales como Sächsische Separatisten («Separatistas de Sajonia»), que tiene las siglas SS, las mismas que la milicia de élite del partido nazi. «Nuestras autoridades de seguridad han frustrado así en una fase temprana planes golpistas por parte de terroristas de derechas, que ansiaban la llegada de un 'Día X' para atacar a la gente y a nuestro Estado con fuerza armada», dijo la ministra del Interior, Nancy Faeser, en un comunicado.
Spiegel Online informó de que uno de los sospechosos era un político del partido nacionalista Alternativa para Alemania (AfD) en el este de Alemania. Se trataría de la segunda trama golpista descubierta en Alemania en los últimos años. En 2022 se destapó el movimiento denominado «Reichsbürger» («Ciudadanos del Imperio»), liderado por un aspirante a príncipe con ambiciones de derrocar al Estado e instaurar un Gobierno provisional, un caso que conmocionó a Alemania por el nivel de detalle de su red y planificación.
El grupo objetivo de la operación del martes se formó como tarde en noviembre de 2020, según informó la fiscalía federal en un comunicado. «Se trata de un grupo armado de entre 15 y 20 individuos cuya ideología se caracteriza por ideas racistas, antisemitas y parcialmente apocalípticas», añade el comunicado. Convencidos de que Alemania se acerca al colapso, en el que se derrumbaría el Gobierno y la sociedad, profetizado para un «Día X» indeterminado, los miembros del grupo se han estado entrenando para utilizar la fuerza con el fin de establecer un nuevo sistema en el este del país inspirado en el nacionalsocialismo, según los investigadores. «En caso necesario, se supone que los grupos de personas no deseadas deben ser expulsados de la zona por medio de la limpieza étnica», dice el comunicado.
Los fiscales afirmaron que habían completado un entrenamiento paramilitar, centrado en la guerra urbana, el manejo de armas de fuego, las marchas nocturnas y las patrullas. El grupo también había adquirido material militar, como trajes de camuflaje, cascos de combate, máscaras antigás y chalecos antibalas. La Agencia de Seguridad Interior de Polonia informó de que había detenido al presunto cabecilla y miembro fundador, Jörg S., de 23 años, en la ciudad fronteriza polaca de Zgorzelec, tras meses de colaboración entre las autoridades polacas y alemanas. Los fiscales alemanes identificaron a algunos de los demás detenidos como Jörn S., Karl K. y Norman T., de acuerdo con la práctica judicial alemana de no publicar apellidos.
Dos de los sospechosos pertenecen a una familia de conocidos militantes de extrema derecha en Austria, según Spiegel Online. Siete de los sospechosos fueron capturados en las ciudades del este de Alemania, en Leipzig, Dresde y Meissen y sus alrededores. Spiegel informó de que uno de los sospechosos, al que identificó como Kurt H., era un político de AfD en el estado oriental de Sajonia, donde el partido estuvo a punto de ganar unas elecciones estatales en septiembre. Es miembro electo del ayuntamiento de Grimma, cerca de Leipzig, según el sitio web de la ciudad.
Spiegel también dijo que es tesorero de la organización juvenil de AfD en Sajonia «Junge Alternative» («Alternativa Joven») desde octubre. La oficina nacional de AfD y la rama local de Leipzig no respondieron inmediatamente a una solicitud de Reuters para hacer comentarios. Spiegel dijo que el abogado defensor de Kurt H. no estuvo disponible para hacer comentarios. Los ocho se enfrentan a cargos de participación en una organización terrorista nacional. Algunos serán procesados como menores al ser adolescentes. Se espera que los sospechosos comparezcan ante el juez en las siguientes horas.
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Ocho hombres que querían derrocar un Estado con centenares de miles de efectivos armados. Menudo peligro.