El dimisionario presidente del PP de Eivissa, Juan Colomar, aseguró
ayer que su decisión de abandonar la presidencia del partido es
irrevocable y añadió que, desde el pasado 31 de marzo, se considera
dimitido «porque no se ha podido hacer la renovación a la que me
comprometí». Colomar afirmó que, en democracia, en las votaciones
deberían bastar los votos «de la mitad más uno», cosa que en su
opinión no ha sucedido en la larga crisis que atraviesa el PP de
las Pitiüses.
Colomar aseguró ayer mismo que, con su decisión, no pretende ir
contra nadie y reiteró que se va simplemente «porque no me han
dejado cumplir los que estaba en mi programa». Además de su
voluntad de dejar la presidencia de los populares de Eivissa,
Colomar apuntó su intención de retirarse de la primera línea de la
política, pese a que seguirá como militante del PP. En cualquier
caso, Colomar quiso dejar claro que en ningún momento ha pretendido
obtener beneficios personales de la política, como lo demuestra el
hecho de que no ha intentado acceder a ningún cargo público pese a
presidir el partido en Eivissa.
Por su parte, el defenestrado candidato a la Presidència del
Consell, Pere Palau, aseguró ayer que, si desde el primer momento
se hubiera respetado el reglamento del partido, el PP no se
encontraría ahora en esta situación.
El origen de esta nueva crisis del PP ibicenco se encuentra en
la confección de las listas al Consell Insular de Eivissa. El
actual president de la institución, Antoni Marí Calbet, accedió a
encabezar de nuevo la candidatura para resolver la crisis abierta
por la sucesión entre Pere Palau y Enrique Fajarnés.
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