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RUIZ COLLADO/J. MASCARELL Cancelación de reservas hoteleras y de grupos de viajes de incentivos fue la tónica general a lo largo del día de ayer tras confirmarse que las negociaciones entre patronal y sindicatos no habían fructificado para desconvocar la huelga de autocares.

Un fin de semana con récord de pasajeros en Son Sant Joan, más de 300.000, y en ocupación hotelera, rondando el 99% en gran parte de la oferta de alojamiento, según los hoteleros, agencias de viajes y touroperadores, «se va a saldar como uno de los más lamentables en cuanto a imagen turísticas. No es lógico lo que ha pasado y las consecuencias serán incalculables».

PLANES
Las reuniones mantenidas a lo largo del día de ayer entre los propios touroperadores para repartirse los taxis, y el sector turístico con la dirección del aeropuerto de Palma, «ha logrado paliar las primeras horas de huelga, pero a partir de mañana por la mañana (por hoy) la situación se va a endurecer y complicar en todos los aspectos».

El reparto de taxis para realizar los traslados provocó que ayer tarde dicho servicio brillara por su ausencia en Palma: «Es lógico, ya que muchos han optado por dormir y poder atender en condiciones la jornada de trabajo contratada por los touroperadores para los próximos tres días a una media de 75.000 pesetas por jornada», explicaron representantes de las patronales del taxi.

Esta falta de transporte y el llamamiento realizado por la patronal del transporte discrecional provocó que el servicio de urgencia 112 recibiera ayer numerosas llamadas de personas ofreciendo su vehículo para transportar turistas: «Hemos recibido llamadas y las hemos canalizado hacia la patronal Aviba».

Como la resolución de los servicios mínimos únicamente afectaba al transporte aeroportuario y porturario, hoy no habrá transporte escolar: «Lamentamos todo esto, pero se ha hecho lo imposible para llegar a aun acuerdo con los sindicatos, ya que hemos cedido hasta un 5% de aumento en cuanto a incremento salarial, pero no ha podido ser», puntualizaba ayer el presidente de la patronal del transporte discrecional, José María Blai.