La periodista argelina Malika Abdel Aziz, exiliada en España desde
1994, pronunció ayer una conferencia en el Centre de Cultura Sa
Nostra sobre «Identidad y hecho migratorio», dentro del ciclo «La
cultura de los valores en el cambio de milenio». Abdel Aziz, que ha
dejado la profesión periodística para dedicarse por entero a la
Asociación de Trabajadores e Inmigrantes Marroquíes en España
(ATIME), dijo que ha tenido que explicar qué es Europa a la gente
del Sur para que conozca la situación reflexione sobre lo que
ocurre en el continente.
«Lo primero que deben saber es que Europa no es una
nacionalidad, sino una dinámica hacia una ciudadanía, que nos da la
posibilidad a los inmigrantes de dar a conocer nuestras
reivindicaciones, y que en relación a los cambios demográficos y de
inserción laboral, los inmigrantes entramos en un mercado en el que
los huecos están en los servicios y, en el caso de las mujeres, en
trabajos relacionados con el cuidado de ancianos, niños o la
prostitución», explicó Abdel Aziz.
Otro aspecto que destacó la intelectual argelina es que, «además
de la dinámica hacia una nueva ciudadanía, Europa tiende a una
universalización de los derechos humanos, cuando éstos no son un
privilegio de Europa "matiza la periodista", sino que corresponde a
las aportaciones de diferentes culturas, entre ellas la
musulmana».
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