El Norge, yate real de Noruega, llegó ayer a la base de Portopí para traer a Palma la embarcación Fram XII del rey Harald, que llegará mañana para participar en la Copa del Rey. Su estancia en Mallorca se prolongará durante el transcurso de la competición y hará las funciones de alojamiento flotante.
El Norge es uno de los últimos grandes yates de antaño en servicio y exhibe un romántico perfil, característico de su época. Diseñado por la prestigiosa firma Camper & Nicholsons, inició sus singladuras en 1937 como el Philante para Sir Thomas Sopwith. Su original armador lo utilizó como escolta para las embarcaciones de regata de la clase J Endeavour, los célebres competidores de la Copa América. Poco después, al estallar la Segunda Guerra Mundial, fue requisado por la Royal Navy y convertido en patrullero antisubmarino. Finalizado el conflicto, el pueblo noruego lo adquirió como obsequio para el rey Haakon, convirtiéndose desde entonces en el yate real del país nórdico.
Con 1.786 toneladas de desplazamiento el Norge mide 80 metros de eslora y alcanza los 17 nudos de velocidad. Sus dependencias para 50 invitados, divididas entre grandes salones revestidos en maderas nobles, conservan todo el lujo y carácter de un auténtico yate de leyenda.
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