Alejandra Prat está sorprendida de que casi todos los días toma el sol en compañía de fotógrafos camuflados en matorrales a no mucha distancia de donde su madre fondea el «Amanda».
"¿Será que quieren ver cómo te bañas?
"Será por eso, o por pillarme... No sé.
"¿En top less...?
"Si alguien espera que me ponga en top less a tomar el sol, pierde el tiempo. Porque habiéndome ofrecido dinero para que me fotografíara así, y habiéndome yo negado, ¿cómo voy a dejar que me hagan un top less gratis? Ni gratis, ni cobrando, ni nada. Por otra parte, por el hecho de que me hagan fotos bañándome sin que yo lo sepa, no voy a dejar de venir a Mallorca, ni a Palma, ciudad que me encanta por su gente y por su marcha, y porque aquí tengo muchos recuerdos de mi padre que me invitan a venir año tras años.
"¿Qué recuerdos?
"Muchísimos. Los lugares y la gente, sobre todo, que te lo recuerdan constantemente.
"Es que tu padre era un tipo fenomenal y un colega nuestro, pues colaboraba en todo lo que le pedíamos. Y como profesional, ¿qué quieres que te cuente de él que tu no sepas?
"Mi padre era un fuera de serie. Fue una pena que siendo una persona tan buena, ya no esté entre nosotros. ¡Con lo que podía haber aportado todavía!
"Me temo que tú eres de las pocas chicas jóvenes famosas, hijas de padres famoso, que trabajan y que, encima, tratan bien a la prensa, lo cual no es normal, porque lo normal es todo lo contrario: Malas caras, malos gestos, carreras y salidas de tono. Porque hay cada uno, y cada una, por ahí...
"Todo eso lo he aprendido de mi padre y como también comparto profesión, pues... no sé si lo sabes, me he chupado guardias en la puerta de un hotel esperando a que salga el famoso de turno para, por lo menos, preguntarle algo, una tontería. Por eso entiendo que este trabajo obliga a estar ahí muchas horas, y que el mejor premio es no irse de vacío.
"O sea, que ¿tú también has «perreado»?
"Digamos que sí, que sé lo que es eso.
"¿Te ha rechazado alguien, como nos ocurre a nosotros?
"Pues sí. Recuerdo que una vez Ruiz Gallardón no quiso contestar a una pregunta que le hice.
"¿Qué opinas de los «hijos de»?
"No quiero entrar mucho en esta cuestión, pues es un tanto personal, pero yo creo que para sentirte realizado en la vida has de trabajar y llevar un orden en tu vida y no vivir de ser hijo o hermano de...
"Pero hay gente que está viviendo de eso.
"Sí, y ya te he dicho que, respetando mucho a esas personas, creo que es triste vivir así, porque ¡qué vida más aburrida! y ¡qué poco se valoran las personas que viven así, o de las van por ahí vendiendo su vida privada! A mí, vivir así me daría mal rollo. Claro que también los hay que los han metido en ese lío y no saben cómo salir de él.
"A ti en una ocasión te metieron en uno: Cuando aquellas fotos con Raúl, ¿recuerdas?
"A pesar de este cuerpo, sigo siendo una niña, y en aquel momento, más todavía. Aquello me pilló por sorpresa, porque sin ser nada ya viste como se contó. Se dijo que habíamos pasado una noche de traca, cuando no ocurrió nada, sólo una amistad y una conversación. A raíz de aquello me di cuenta de lo fácil que es inventarse una historia. Por eso, a partir de entonces me ando con cuidado.
"¿Te han invitado a ir a «Tómbola»?
"Sí, pero he dicho que no. No sé, pero creo que si voy tengo más que perder que ganar. A pesar de que se han contado cosas de mí, de mi vida privada nadie sabe nada.
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