La petición de ayuda humanitaria para paliar los efectos del
«genocidio perpetrado por el ejército indonesio y sus milicias» y
la sensibilización de las instituciones de Balears hacia la
cuestión política no resuelta en Timor, para lo que se pondrá en
marcha un plan de administración llevado conjuntamente por la ONU y
Timor son los objetivos de las reuniones que mantuvieron ayer
representantes de la ONG portuguesa OIKOS y del Consejo Nacional de
Resistencia de Timor con las instituciones de Balears.
El alcalde de Palma, Joan Fageda, recibió a esta delegación de
Timor, encabezada por el presidente del Consejo Nacional de
Resistencia, Henrique Jerónimo, que se encuentra en Palma para
sensibilizar a la ciudadanía sobre los problemas que padece la isla
indonesia. Joao Fernandes, miembro de OIKOS, dijo que en la
actualidad se está evaluando en Timor las áreas más afectadas por
la guerra: educación, agricultura, sanidad y vivienda y señaló que,
en determinadas zonas, el 95 por ciento de las viviendas ha quedado
destruida.
Esta misma delegación fue recibida en audiencia, también, por el
presidente del Govern de les Illes, Francesc Antich, quien expresó
su deseo de cooperar con Timor y dijo que, aunque la disponibilidad
de fondos para la ayuda de emergencia para este año está agotada,
se destinarán dos millones a proyectos que presente la organización
OIKOS. De cara al año próximo, Antich comprometió más fondos para
financiar proyectos que se lleven a cabo en Timor.
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