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La teóloga feminista Mercedes Navarro coincide en que el movimiento feminista choca a menudo con las barreras que le impone la sociedad machista, aunque está convencida que hay temas en los que no hay vuelta atrás. La sexualidad es uno de ellos "en opinión de Mercedes Navarro", «donde se ha logrado cambiar el sistema, las mujeres han conseguidologrado avanzar muchos en las relaciones, introducir la democracia en la familia, controlar la concepción, decidir sobre el aborto, etc. y donde vendrán muchos más cambios. Pero "advierte", hay un problema y son las nuevas generaciones, sobre las que las estadísticas dicen que hay una militancia cero y creen que todo está conseguido, cuando no es así. De modo que, si nos olvidamos de las nuevas generaciones y le hacemos ver que hay que seguir luchando, el movimiento feminista se irá al carajo».

Mercedes Navarro, que ayer impartió en Palma una conferencia sobre «El género como crítica a la ética actual», organizada por la asociación «Creyentes y Feministas», insiste en que a las mujeres les queda mucho por conseguir en el mundo del trabajo, donde no sólo interviene la sexualidad, sino el poder y el dinero, donde considera que las mujeres deben volver a hacer la revolución.

Licenciada en Ciencias Bíblicas y doctora en Psicología y Teología, disciplinas que enseña en la Universidad Pontificia de Salamanca, Mercedes Navarro arremete contra teorías como las de Lipovisnki, descrita en su libro «La tercera mujer», que dice que son las mismas mujeres quienes impiden el avance.

La teóloga feminista explicó en su conferencia que en cualquier ciencia, cuando se introduce la variable del género, deja ver que ha ocultado al 50 por ciento de la Humanidad que son las mujeres y «es lo que pasa tanto la ética filosófica como la cristiana, ya que, al haber introducido el feminismo la categoría de género, ha dejado ver el cejo de la ética».