Dos dulces, que acapararán el interés del público mallorquín, se relacionan con la festividad de los Reyes Magos: El típico carbón y el roscón de Reyes.
El primero se hace notar desde hace unos días en las principales confiterías de Palma y su precio por kilo oscila entre las 900 y 950 pesetas. Los titulares de la pastelería Mestre de Palma, Bernat Mestre y Margalida Alameda, señalaron que «el carbón no suele fallar en esta fecha, pues precede a modo de broma al regalo que luego 'caerá'».
Los investigadores sitúan la aparición de este pastel de la suerte en Francia en la Navidad anterior al siglo XI y guarda en su interior una haba como símbolo protector. El escritor Miquel Ferrà Martorell afirma: «En Mallorca, también se solía regalar antaño a los niños que celebraban su primera comunión».
Este delicado y colorista pastel se elabora, según receta del maestro Bernat Mestre, a base de 2 kg. de harina de fuerza, 4 huevos, 300 gramos de azúcar, 100 gramos de mantequilla, 150 gramos de levadura de panadería, aroma de naranja, limón, un poco de canela, anís molido y 300 gramos de agua. Amasar todos los ingredientes menos la mantequilla, que se añadirá a la mitad del amasado. Juntar con la levadura y hacer una masa fina y elástica. Cortarla en porciones y hacer los roscones incluyendo las sorpresas de una haba y un pequeño rey de cerámica. Dejar fermentar, decorar con frutas y hornear hasta que tome un bonito color.
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