El equipo de gobierno del Ajuntament de Palma ya dispone de los
resultados de las mediciones sonométricas efectuadas el pasado 11
de diciembre en sa Llonja y está buscando una serie de medidas
complementarias para aplicar en la zona una vez que se hagan
públicos dichos resultados. No obstante, parece que se trata de un
tema tabú, ya que la concejal de sanidad del Ajuntament de Palma,
Maria Crespo, llegó a asegurar ayer a los medios de comunicación
que no contestaría a más preguntas sobre esta temática «hasta que
los resultados no se hagan públicos».
Los resultados de estas pruebas ya se hubieran podido dar a
conocer a la opinión pública hace bastantes días, incluso antes de
que acabara el período de declaración de Zona Acústicamente
Contaminada de sa Llonja el pasado 31 de diciembre. De hecho, Maria
Crespo explicó dos días antes de que acabara este período que ya
tenía en su poder el veredicto de las pruebas sonométricas, pero
que no quería hacerlo público.
A pesar de que ha quedado claro que si los resultados de las
pruebas son positivos se debe avanzar el cierre de los bares de la
zona, Crespo reconoció ayer por primera vez en muchos meses «que en
su momento recibimos más de seis mil firmas para mantener abierta
sa Llonja» y que los vecinos que han movido las protestas «no son
tantos, la protesta es una acción prácticamente exclusiva de
Felicitas Marcos». La concejal no ha querido destacar tampoco
cuáles serán las medidas complementarias que se adoptarán en la
zona, pero la revisión del cumplimiento de las actividades por las
cuales tienen licencia los establecimientos, puede ser una de
ellas.
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