Las vacaciones en el mar ya no son privativas del sol y el buen tiempo. Once escalas configuran el panorama portuario de Palma por lo que a visitas de buques de crucero se refiere. Una actividad que ya se mantiene durante todo el año y que en 1999 ha sumado 492 visitas en Ciutat, de las cuales 213 se han registrado entre los lujosos buques internacionales con base en la Isla.
Este tráfico, que en Balears ha redondeado las setecientas cincuenta escalas, supone un incremento del 36 por ciento respecto a 1998, todo un récord sin precedentes. Asimismo, el número de pasajeros en régimen turístico se calcula que ronda ya el medio millón. En el mes de diciembre el crucero más lujoso ha sido el R-Two, de 30.277 toneladas, que recaló los días 15 y 19 de diciembre.
Esta unidad, inaugurada el pasado año y perteneciente a Renaissance Cruises, de Miami, es la única que mantiene su actividad durante todo el año. Sus precios por persona van del medio millón a los dos millones por doce días. La mayoría de pasajeros dispone de grandes suites con terraza privada, en una atmósfera de salones inspirada en el estilo victoriano.
Durante las fiestas navideñas ha destacado asimismo la visita de los superferrys italianos Fantastic, Majestic, Splendid y Excelsior, de la compañía Grimaldi, que efectuaron durante estas fechas viajes turísticos desde su base en Génova.
Así, el día 31 coincidieron por vez primera a lo largo de la jornada, y durante la Nochevieja, dos de estos buques gemelos. Otras unidades registradas en diciembre han sido el pequeño crucero de lujo Astra II, que navega como un selecto yate; el ferry ucraniano Palmira y el marroquí Marrakech, que visita la isla de Mallorca por vez primera.
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