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Costa Nord, el proyecto de Michael Douglas, ha abierto ya sus puertas al público en Valldemossa. Y debemos valorar positivamente que personas que gozan de popularidad encuentren en nuestra tierra atractivos como los de la Serra de Tramuntana, lo que nos tiene que mover necesariamente a la reflexión sobre su conservación y su mantenimiento.

Naturalmente, es importante que podamos mostrar nuestros valores culturales, paisajísticos y medioambientales no sólo a quienes nos visitan, sino también a aquellos mallorquines que no los conocen, así como a las futuras generaciones, y, en este sentido, hay que valorar en su justa medida la iniciativa de Douglas, aunque debemos pensar que no sólo quienes vienen de otros lugares tienen algo que decir por lo que respecta a la Serra, un patrimonio que debemos cuidar los propios mallorquines.

Pero los atractivos que debemos tener presentes y aquello que debemos conocer es la misma zona norte de la Isla, sin tener que pasar necesariamente por la visión que tienen otras personas procedentes de otros países de ella.

No nos encontramos en otras épocas, y Douglas no tiene nada que ver con el arxiduc Lluís Salvador, que fue, sin duda, determinante en la promoción en el extranjero de Mallorca. Hoy por hoy, la Isla es conocida en todo el mundo y se tienen en cuenta muy especialmente los valores con los que contamos.

Por todo ello, la iniciativa de Michael Douglas no es en absoluto imprescindible, sino una más a la que se pueden sumar muchas otras, en especial desde las instituciones públicas, para fomentar el conocimiento de la cultura y los lugares de la Isla, lo que redundaría, sin lugar a dudas, en beneficio de todos.