Los escolares, de ocho y hasta catorce años de edad, demostraron un compañerismo sin límites. Foto: JAUME ROSSELLÓ.

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Gerard Pons Pou es menudo y ágil. A sus apenas diez años es, junto Julián Narváez "de trece", el ganador de la final de la fase local del XXXVI Campeonato de España de Parques Infantiles de Tráfico. A partir de ahora, esos «diablos de la bicicleta» deberán entrenarse duro para dejar el pabellón de Palma bien alto durante el campeonato a celebrar el Logroño del 5 al 8 de mayo. Junto a ellos se entrenarán "por si hubiera bajas", Isabel Llinàs Pizà, de once años, y Joan Company Morell, de trece años.

Durante tres semanas han pasado trescientos alumnos de ocho colegios de Palma por las instalaciones del parque infantil. De ellos, un jurado formado por representantes de la Jefatura de Tráfico y monitores del Parque de Tráfico de la Policia Local, eligieron a cuarenta finalistas... unos finalistas que han deparado muchísimas sorpresas, como que el campeón ha sido un chaval de diez años, cuando lo normal es que sean los de trece y catorce los que ganen o que, por vez primera, una valenta dona haya estado a las puertas de representar a Palma. Tal vez se deba a que tanto uno "Gerard" como la otra "Isabel" sean de Sant Jordi, un núcleo de población con fuerte tradición ciclista.

Los otros dos seleccionados pertenecen al colegio Lladó (del Coll d'En Rabassa) y del Sagrat Cor (en Son Espanyolet).
Ayer, pese a que eran muchos los alumnos que habían quedado fuera de la selección, el compañerismo fue la nota dominante durante la entrega de medallas. «Que os llame en primer lugar no significa que hayais quedado los últimos», dijo Daniel Mut, uno de los monitores del parque infantil. Todos los presentes fueron desfilando entre aplausos de sus compañeros. Las ovaciones más cálidas fueron para Joan Company, Isabel Llinàs, Francisco Julián Narváez y Gerard Pons, que no podían ocultar su satisfacción por ser los mejores en sortear difíciles pruebas sobre dos ruedas.