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Los dos juzgados de Familia de Palma tramitan al año unos 2.500 asuntos de separaciones matrimoniales, divorcios o nulidad instados por uno de los cónyuges o en común. Según confirmó ayer el magistrado-juez del Juzgado de Primera Instancia número 12, Joaquín María Andrés Joven, prácticamente, el registro de asuntos crece entre un 5 y un 10% al año. «Somos dos juzgados de familia y registramos cada uno unos 1.200 asuntos, es decir, casi 2.500 anuales en Palma. Quedarían fuera de este cómputo el partido judicial de Inca como el de Manacor y las restantes islas», afirmó. El juez Andrés Joven pronunció la conferencia «Los procesos de familia en la nueva Ley de Enjuiciamiento Civil» en el transcurso de unas jornadas monográficas sobre el Derecho de Familia organizadas por la Escuela de Práctica Jurídica del Colegio de Abogados de Balears en el Centre de Cultura de Sa Nostra. En la jornada también participó Miguel Coca, catedrático de Derecho Civil de la UIB, que pronunció la conferencia «Las cargas del matrimonio. Alimentos, gastos ordinarios y extraordinarios en los casos de separación y divorcio». Andrés Joven analizó de manera muy resumida los cambios que han habido en la Ley de Enjuiciamiento Civil en lo que atañe al procedimiento de familia. Ante un numeroso público, el juez explicó las distintas actuaciones procesales dentro del aérea del Derecho de Familia, las medidas previas, las coetáneas, el procedimiento contencioso de separación, divorcio o nulidad, así como el procedimiento de separación, nulidad o divorcio instado por ambos cónyuges de común acuerdo o por una de las partes con el consentimiento de la otra. Por último, abordó las modificación de medidas definitivas y el tema de las uniones de hecho. «La nueva Ley de Enjuiciamiento Civil afectará en una cuestión tangencial en lo que respecta a la liquidación del régimen económico matrimonial, que aquí en Balears es de separación de bienes, frente al que existe de forma mayoritaria en la península, que es de gananciales», explicó. Añadió que las causas esgrimidas para justificar una separación son «múltiples, y no es fácil tratar este tema», resumió.