Los accidentes laborales en Balears siguen aumentando este año pero
a un ritmo menor que en ejercicios anteriores según expusieron ayer
el conseller de Treball, Eberhard Grosske, y la directora general
de Salud Laboral, Aina Vicens.
A falta de datos concretos, durante el primer trimestre del año
se detecta que «no ha habido una subida tan importante» de los
siniestros laborales explicó Aina Vicens, quien expuso que el ritmo
de crecimiento se ha desacelerado en torno a los tres o cuatro
puntos. Así, en accidentes graves y mortales «somos de las
comunidades que menos han crecido» y en el conjunto del país «ya no
estamos en los primeros lugares como era habitual».
Esta ralentización del ritmo de crecimiento de los accidentes
laborales en la Comunitat es imputable, en opinión de los
responsables de la Conselleria de Treball, al esfuerzo dado por el
Pacte de Progrés para quien este tema es «asunto prioritario».
Grosske pidió «prudencia» y señaló que todavía es pronto para hacer
balance del plan de choque contra la siniestralidad laboral que se
puso en marcha a principios de este año si bien ya en 1999 Treball
empezó a tomar las primeras medidas al respecto.
El conseller de Treball manifestó que no es tanto conseguir que
se reduzcan los accidentes laborales sino conseguir una «inflexión
en la curva creciente de los accidentes laborales» y dejó muy claro
que si en este año las medidas adoptadas no han dado fruto
«apretaremos más el acelerador». Grosske destacó la importancia de
esta ralentización del ritmo creciente de los accidentes laborales
en un contexto de «frenética» actividad económica y masiva entrada
al mercado laboral de trabajadores sin formación.
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