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Los miembros de la Junta Rectora de la Unió de Cooperatives Agràries de Balears, UCABAL, trasmitieron al president del Govern, Francesc Antich, su preocupación por la grave situación por la que atraviesa el campo balear y le pidieron que tomara medidas, a corto y a largo plazo, para paliar la falta de rentabilidad del sector. El encuentro de ayer, al que asistieron los representantes de 17 cooperativas de la Isla, forma parte del programa de contactos que el máximo mandatario de la Comunitat está llevando a cabo con los representantes del campo mallorquín días antes de que se celebre la manifestación del sábado.

En este sentido la presidenta de UCABAL, Jeroni Bonafé, aseguró que su organización, «al ser una patronal y contar entre sus miembros con afiliados de la FAGB y de Unió de Pagesos», no se manifiesta ni a favor ni en contra de la protesta y ha dado «libertad» a sus asociados para que decidan si quieren o no acudir.

Los representantes agrícolas aprovecharon su audiencia con Antich para pedirle un esfuerzo de la Administración con objeto, señalaron, de que los conflictos agrícolas se resuelvan «por la vía inevitable» del diálogo, el consenso y el trabajo conjunto de todos los sectores implicados. Asimismo, respecto a las pérdidas acumuladas por la sequía, los miembros de UCABAL, solicitaron al Ejecutivo que establezca relaciones productivas con el Gobierno central «para reclamar ayudas a la Unión Europea». Otro punto que debe mejorar, según los agricultores, es la implicación de toda la sociedad balear, y de todo el sector terciario, en el consumo de productos autóctonos «y es el Govern el que tiene que adoptar el papel de mediador y de posibilitador de este hecho», aseguró Bonafé.