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P. CANDIA/N. DOMBLÀS
Sebastià Vallori, el funcionario del presunto espionaje informático que trabajaba en el despacho situado junto al que utilizaba el ex presidente Jaume Matas, será el primero en prestar declaración ante el juez del «caso Bitel».

Según confirmaron fuentes judiciales, el titular del Juzgado de Instrucción número 9 de Palma, Enrique Morell, espera que el Grupo de Delincuencia Económica de la Policía Nacional concluya sus investigaciones para reanudar la instrucción del supuesto caso de espionaje informático. Vallori ocupaba una de las dos mesas situadas en el salón previo al despacho del ex president Matas, y ahora ministro de Medio Ambiente, donde presuntamente llegaban las copias de los e-mail que enviaba o recibía el ex presidente de la Comisión Insular de Urbanismo, Francesc Quetglas. El propio Matas confirmó en su momento que dicho funcionario trabajaba en el equipo del gabinete de Presidència, aunque reiteró que en ningún momento se manejaron mensajes enviados por Quetglas.

Hasta ahora, han prestado declaración ante los funcionarios policiales todos los técnicos vinculados a la empresa semi-pública Bitel.