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El Govern ha tenido que reconocer que se está complicando la posibilidad de adoptar medidas de contención urbanística que frenen el crecimiento en suelo urbano y urbanizable. La Conselleria d'Obres Públiques ya ha manejado media docena de borradores con diversas medidas cautelares para declarar una moratoria de construcción en suelo urbano hasta que se definan las propuestas concretas que permitirán reducir este tipo de suelo.

El grupo ecologista GOB volvió a reclamar ayer al president Francesc Antich que se aprueben medidas urgentes para contener el desbocado crecimiento urbanístico y turístico. Durante la audiencia que ayer mantuvieron con el president del Govern, los miembros de la formación ecologista recordaron al president que el crecimiento turístico es la raíz de la que surgen el resto de problemas de Balears relacionados con el agua, la energía y la saturación de las comunicaciones.

Los representantes del GOB volvieron a pedir al president «valentía y firmeza» a la hora de emprender estas actuaciones en materia urbanística. Los miembros del GOB aseguraron que el president había coincidido en su análisis con los representantes de la formación ecologista y les comunicó que el Govern está trabajando en la redacción de estas medidas cautelares.

«Sabemos que se están preparando estas medidas pero que su aprobación se está complicando», aseguró el presidente del GOB, Joan Rita, al término de la audiencia con Antich. El dirigente ecologista aseguró que la formación que preside es consciente de las dificultades que comporta actuar en suelo urbano y urbanizable «pero también hay que tener presente que es aquí donde se encuentra el verdadero problema de Balears».

A pesar de que el Govern ha reconocido la complicación con la que se está encontrando a la hora de aprobar las medidas cautelares, el conseller d'Obres Públiques, Josep Antoni Ferrer, ha insistido en que el Govern no renuncia en ningún caso a aprobar una moratoria en suelo urbano.