El Plan Urban prevé otras iniciativas para rehabilitar el centro de la ciudad.

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El alcalde de Palma, Joan Fageda, inauguró ayer la primera de las cinco grandes actuaciones previstas en el proyecto Urban El Temple para los barrios de sa Gerreria y sa Calatrava: el centro social Flassaders. Tras descubrir una placa conmemorativa y rodeado de casi todos los ediles municipales y numerosos vecinos de la barriada, el primer edil visitó las instalaciones de un centro que desde ayer está a disposición de los residentes en sa Gerreria. Al acto asistieron también la directora general de Consumo, Tuni Allés; el director general de Ordenación del Territorio, Miquel Cabellos y el secretario general técnico de Presidencia, Fernando Pozuelo.

La rehabilitación de la vieja fábrica de can Ribas ha costado 373 millones de pesetas (60 millones para la adquisición, 284 en la rehabilitación y 29 para equipamientos) y el trabajo se ha realizado respetando la estructura original del edificio y la arquitectura fabril. Incluso se ha conservado uno de los elementos más singulares, la gran chimenea de la fábrica textil. Los servicios que ofrece el centro se distribuyen entre sus 3.006 metros cuadrados, repartidos en cinco plantas. En la planta baja se han ubicado la sala de exposiciones, el bar y un club de la tercera edad; en la primera planta, la sala de atención psicopedagógica, el servicio de canguros para niños, talleres y el aula de alfabetización. En la planta segunda se ha situado la sala de conferencias, una sala multiusos y despachos; en la tercera está la ludoteca, el centro informático, espacio para actividades físicas y la sala de estudio. Por último, en la cuarta planta se ha situado un espacio para actividades de ocio infantil y juvenil y un club de entretenimiento.