La Comisión de la Sequía puso sobre la mesa en la reunión celebrada
ayer la posibilidad de suministros de agua alternativos a partir de
pozos sondeados en Son Ferriol, Son Castelló, Polígono de Can
Valero y su conexión con Son Tugores. Los metros cúbicos de agua
que podrían extraerse de estos pozos, algunos salobre y otros no,
está aún por determinar, según informó ayer el director general de
Recursos Hídricos, Antonio Rodríguez.
Este explicó, también, que se está considerando la propuesta
realizada tanto por Palma, a través de la Empresa Municipal de
Aguas y Alcantarillados (EMAYA), como por Calvià de explotar nuevos
pozos sondeados, que podrían aportar un mínimo de 36.000 metros
cúbicos diarios. Rodríguez aclaró que se trata de una propuesta
«que venimos estudiando desde hacer dos o tres semanas, pues se
debe determinar en qué modo afectarán las extracciones a cada
pozo».
Ayer no se tomó ninguna decisión concreta, pero sí se acordó que
de ninguna de las maneras se puede seguir realizando extracciones
en el acuífero de Llubí-Muro (sa Marineta), «por lo menos hasta el
próximo otoño», que se encuentra por debajo del límite permitido.
Con respecto a los pozos de Na Burguesa, la Comisión de la Sequía
barajó como mejor opción el repartir las cantidades de agua
extraída entre todos ellos, «es decir, evitar sacar mucho de
algunos y nada o muy poco de otros». De este modo, según Rodríguez,
«se podrían evitar la depresión de bombeos que dan lugar a la
salinización de los pozos».
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