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El sector agrícola de la Isla agradeció las precipitaciones que, después de varios meses, cayeron en la Isla durante el fin de semana aunque la mayoría de los encuestados aseguraron que «llegan tarde porque gran parte de algunas cosechas ya se ha perdido».

Las lluvias se dejaron ver prácticamente por toda la geografía mallorquina y favoreció, especialmente, a los cultivos de almendros y algarrobos ya que muchos ejemplares, especialmente los más jóvenes, corrían serio peligro de morir por la falta de agua.

Otro beneficio palpable de las lluvias, en lo que respecta a la actividad agrícola, es que los pozos, a medida que se vaya filtrando el agua, subirán de nivel y, además de garantizarse algunas semanas más de riego, desaparece el riesgo de salinización para aquellos que están más cerca de la costa. Los frutales y hortalizas que no se producen con regadío, por su parte, también se verán beneficiados, sobre todo por que la tierra se mantendrá húmeda unos días y las plantas podrán continuar con su ritmo de crecimiento.

Sin embargo hay que tener en cuenta que en algunas zonas las precipitaciones fueron en forma de granizo y que, por lo tanto, muchas cosechas pueden haber sufrido daños irreversibles por los golpes.

Otros cultivos, como los cereales y el forraje, no se recuperarán demasiado a pesar de la lluvia caída. En las zonas de Llucmajor, Santa Maria o Petra, se ha perdido entre el 70 y el 90 por ciento de la cosecha ya que las plantas no han crecido bien y producirán menos grano.

El cultivo de cereales y forrajes ocupa una superficie de 110.000 hectáreas sobre una superficie total cultivada en Mallorca de 250.000 hectáreas. Estos datos reflejan la importancia de este tipo de producción que, según datos consensuados entre el sector y el Govern, ha perdido 2.500 millones de pesetas en lo que va de año.

Las lluvias se trasladan al Noreste
En el día de ayer las nubes se trasladaron a la zona norte y este de Mallorca, con lo que las precipitaciones, sobre todo por la mañana, se registraron en las localidades de estas zonas. Así, la lluvia fue especialmente intensa en el Capdepera, lugar donde se recogieron 30 litros por metro cuadrado; Pollença, donde se registraron 21 litros por metro cuadrado y Lluc, donde cayeron 21 litros. Muy por debajo de los 15 litros recogidos en la Serra d'Alfàbia están los dos litros registrados en Palma; y los algo más de un litro de Portocolom y Porreres.