El Consell de Govern aprobará hoy el proyecto de ley del impuesto
turístico, en el que se han introducido algunas de las sugerencias
facilitadas por los diferentes agentes sociales consultados por los
miembros del Govern, según el conseller de Turisme, Celestí Alomar.
El conseller, dentro de la rueda de contactos que mantiene con
patronales e instituciones, mantuvo ayer un desayuno de trabajo con
la Asociación de Mujeres Empresarias de Balears, las cuales le
mostraron su disconformidad con la fórmula elegida para recaudar la
ecotasa.
Asimismo, el Fomento del Turismo de Mallorca también manifestó
ayer su contrariedad por la fórmula elegida. El Fomento reclama al
Govern que negocie con los hoteleros la implantación de este
impuesto turístico. La comisión permanente del Instituto Balear de
Turismo (Ibatur), por su parte, analizará hoy por la mañana las
medidas a adoptar para frenar la afluencia turística hacia las
Islas, especialmente por lo que se refiere al turismo alemán. En un
principio, está previsto que se asigne una partida de 50 millones,
que puede verse incrementada a medida que evolucionen los
acontecimientos, para recuperar los mercados alternativos, que en
los últimos años se habían visto afectados por el aumento
espectacular del turismo alemán y británico.
La patronal hotelera mallorquina define la actual crisis como
«principio de inflexión del mercado, ya que los touroperadores se
verán obligados a bajar los precios, y las ofertas nunca son
positivas, ya que suponen un descenso de calidad que perjudica al
final a toda la economía balear». Las previsiones de la Federación
Hotelera de Mallorca «no son buenas hasta el 15 de julio, y en el
resto de verano no llegaremos a los porcentajes alcanzados en el
verano de 1999, que fue histórico en todos los aspectos».
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