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Una fundación a cambio de no aprobar la ecotasa. Esta fue una de las ofertas que realizaron los hoteleros al Govern un día antes de que el gabinete que preside Francesc Antich quisiera aprobar el impuesto turístico. Los hoteleros, en una cena con el president Antich y los consellers Joan Mesquida y Celestí Alomar, anunciaron su intención de colaborar económicamente en el fondo turístico a través de una fundación.

Según fuentes del Govern, los hoteleros no precisaron en ningún momento qué aportación realizarían, y dejaron claro que la iniciativa debería ser respaldada por la asamblea de la Federación. Además, los hoteleros también insistieron que la primera opción para conseguir el dinero del fondo turístico debería ser la aportación de la Administración central. Finalmente, la aprobación de la ecotasa se retrasó una semana, y los hoteleros decidieron en asamblea no seguir negociando con el Ejecutivo autonómico. Las negociaciones se rompieron y el Govern aprobó la ecotasa, una semana después de la cena del Consolat de Mar.

La posibilidad de crear una fundación ya fue planteada por los hoteleros en las reuniones que éstos mantuvieron con Unió Mallorquina hace ya varias semanas. Tampoco en aquellos contactos los hoteleros explicaron qué cantidad económica estarían dispuestos a aportar, aunque quedó claro en las distintas reuniones que la mejor fórmula para dar dinero era la creación de una fundación por las compensaciones fiscales que prevé este sistema.