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La Policía Local de Palma se hará cargo de la seguridad y el tráfico del Passeig Marítim a partir del próximo día 11, en lugar de mañana tal y como se anunció en mayo. La razón es que hasta el día 10 no se firmará el convenio de colaboración entre el alcalde de Ciutat, Joan Fageda, y el presidente de la Autoritat Portuària, Francesc Triay. Este traspaso en la gestión de la seguridad vial se adelanta seis meses a la desafectación de la vía por parte del Estado, que tendrá lugar el 1 de enero.

Hasta ahora la única labor de la Policía Local en el Passeig Marítimo era la gestión de la red semafórica y los controles de velocidad y alcoholemia. A partir de la firma del convenio tendrá todas las competencias en materia de seguridad y vigilará y sancionará las infracciones de circulación o aparcamiento. Según explicó el director del Àrea de Protección Ciudadana, Juan José Ferrando, la principal consecuencia de esta nueva responsabilidad será la contratación de seis policías locales que se harán cargo de la vigilancia de la vía. Hasta el momento del traspaso definitivo, la Autoritat Portuària cederá una grúa durante ocho horas diarias y un recinto vallado, con capacidad para 25 vehículos, en las inmediaciones, al que serán trasladados los coches que retire la grúa.

Además, a partir de ahora, se empezará a estudiar la creación de más plazas de aparcamientos, nuevas peatonizaciones o cualquier otra modificación tendente a mejorar el tráfico. La declaración de VAP y la implantación de la ORA son seguras, afirmó Ferrando, aunque todavía no está decidido a partir de cuándo. La Autoritat Portuària, por último, se reserva el aparcamiento de la acera del lado del mar a la altura del Muelle de las Golondrinas y del Pesquero.