El conseller d'Hisenda i Pressuposts, Joan Mesquida, y los
representantes de los empresarios pedirán al Gobierno central que
los puertos de las Islas no tengan que pagar el impuesto de
sociedades, tasa que pretende aplicar Madrid y que supondría un
desembolso para la Autoritat Portuària del 35 por ciento de sus
beneficios.
El argumento de Mesquida y del presidente de la CAEB, Josep
Oliver, y el presidente de la Associació Provincial d'Empreses
d'Activitats Marítimes de Balears, Antonio Grávalos, entre otros,
es que si la tasa se aplica la Autoritat Portuària verá «mermada su
capacidad de invertir para mejorar sus instalaciones». Como quiera
que la entidad tiene una facturación anual de 4.000 millones de
pesetas y unos beneficios de 1.080 millones, la entidad encargada
de gestionar los puertos de las Islas tendrían que pagar cerca de
360 millones de pesetas al Ejecutivo nacional. La Conselleria
d'Hisenda también mandará otra carta al Ministerio de Fomento para
que el Gobierno central se haga cargo del pago de bonificaciones de
tarifas portuarias, aspecto recogido en el Régimen Especial de
Balears y que, en la actualidad son asumidas por la Autoritat
Portuària.
Además, solicitarán que se aumente de 300 a 600 millones la
partida destinada a subvencionar el transporte de mercancías para
empresas dedicadas a sectores considerados de atención preferente y
que se cumplan los plazos establecidos para su abono. Mesquida
explicó que los 300 millones fueron pensados para abarcar un plazo
de seis meses, en julio de 1998, pero se ha ido recogiendo la misma
cantidad en los presupuestos sin tener en cuenta que tienen que
hacer frente a un año entero. Hasta ahora se han presentado 654
expedientes de solicitud de bonificación, indicó el conseller.
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