TW
0

La coalición municipal de Esquerra Unida y Els Verds consideró ayer que sería de justicia que el Ajuntament de Palma compensara a los residentes del centro de la ciudad por las molestias ocasionadas por las innumerables obras del Pla Mirall que se ejecutan desde hace meses. Y como medida compensatoria propuso las «reducciones en las tarifas de la ORA para los residentes y en el Impuesto de Bienes Inmuebles en una cuantía proporcional al tiempo de duración de los trabajos».

El grupo razonó que «la gran concentración de obras que se están llevando a cabo en el centro crean importantes molestias a los residentes, por los ruidos, el polvo o las dificultades de acceso, entre otras». En muchas ocasiones, prosiguió, «estos trabajos duran más tiempo del estrictamente necesario y todavía falta una buena coordinación entre diferentes obras de dotación de equipamientos, pese a la reciente creación del Instituto municipal de coordinación de obras viarias». A ello, insistió el grupo, deben sumarse que «los malos acabados de las obras a menudo obliga a subsanar deficiencias una vez que teóricamente han finalizado, prolongando por más tiempo las molestias frente a la desesperación de los vecinos».

Por todo y en conclusión, la coalición de izquierdas defendió que la reducción de determinados impuestos y tasas municipales en función del tiempo de duración de los trabajos «sería una manera de compensar las molestias creadas».

Y como propuesta concreta se apuntó la tasa para el estacionamiento de vehículos de tracción mecánica en las vías públicas, es decir la de la ORA, que a los residentes les supone un pago de 3.630 pesetas cada año. «Pues, en muchos casos, las obras pueden implicar que no se pueda hacer uso del servicio por el cual se paga la tasa, ya que los trabajos eliminan plazas de aparcamiento