El segundo día de conflicto entre el Insalud balear y la empresa
concesionaria del transporte sanitario, Ambulancias Illes Balears,
se saldó con pequeñas molestias para los usuarios, especialmente
retrasos que afectaron a aquellos pacientes pendientes de
rehabilitación.
El Insalud ha acusado reiteradamente a la empresa de las
ambulancias de incumplir incluso los servicios mínimos que estipula
el contrato, lo que fue negado por Ambulancias Illes Balears. Es
por eso, y para evitar molestias a los usuarios, que el ente, en
colaboración con la Delegación de Gobierno, optó por buscar la
colaboración de otras instituciones y empresas. Ayer, a primera
hora de la mañana, llegaron diez ambulancias de la empresa Urbaser
(filial de Dragados), procedentes de Valencia mientras que por la
noche, en un barco de la Trasmediterránea, llegaron 15 ambulancias
más.
Estos vehículos, que serán conducidos por personal traído desde
Madrid, por cuatro soldados de la Base General Asensio y tres
guardias civiles que fueron desplazados a Manacor, se unieron en
los servicios a las ambulancias que, con carácter de urgencia,
contrató el Insalud a Clínic Balear, Cruz Roja, Clínica Femenias y
RAC Catalunya. De esta forma el ente público intentó dar cobertura
a los, aproximadamente, mil desplazamientos diarios de servicios
programados y a las emergencias que pudieran aparecer ya que acusan
a Ambulancias Illes Balears de no cumplir lo pactado.
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