Pere Roselló se opone a la colocación de una antena de telefonía móvil en el campanario

Pere Rosselló explica a Ultima Hora todo el proceso. «La empresa de telefonía móvil tiene un convenio firmado con el Obispado, idéntico para todas las parroquias, y vino con el mismo para que lo estudiase y lo firmase si, como párroco, estaba de acuerdo». Rosselló habló entonces con responsables de varias iglesias que ya tenían la antena instalada: «Por lo que me dijeron pensé que era una cosa muy sencilla, como si se tratase de poner un ordenador y luego, en la práctica, cuando empezaron a trabajar en el campanario vi que era necesario montar una estructura muy importante, con barras de hierro».

Las barras fueron quitadas a requerimiento del párroco «porque daban muy mal aspecto al campanario». Además, a Rosselló le llegó la noticia de que el Ajuntament de Santa Maria había negado el permiso de instalación de la antena en una calle del pueblo y de que aún no había autorizado las obras en la iglesia. «Paré la obra por dos razones, primero porque no tenían el permiso correspondiente, y segundo porque daba un aspecto inadecuado al campanario», continúa Rosselló. El párroco destaca que la empresa se ha portado muy bien en todo momento, pero confía en que entienda que lo que puede ser adecuado en un campanario puede no serlo en otro: «Éste está reformado y hay mucha gente que lo visita».