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Hoy esperamos a Schröder
El canciller Gerhard Schröder y su segunda esposa, Doris Köps, periodista y jefa de la campaña de imagen que tanto contribuyó en su ascensión al poder, se espera que lleguen hoy a Palma a primeras horas de la tarde. Tenemos entendido que los acompaña la hija de Doris.

Como desde Alemania se asegura de modo oficial que el canciller no ha cancelado ningún compromiso tras el accidente del Concorde ocurrido ayer en París, y que costó la vida a cien compatriotas suyos, mientras no se diga lo contrario hay que seguir pensando que ella llegará a Palma, procedente de Hannover, a bordo de un avión de la LTU sobre las 14.45 horas, mientras que él aterrizará en un avión de la fuerza aérea germana en la base militar media hora más tarde. Ella, sin salir de la terminal de Son Sant Joan, será conducida en un automóvil hasta la citada base, desde donde ambos partirán hacia un lugar de la Isla que no se ha comunicado a la prensa.

En el supuesto de que los Schröder lleguen a Mallorca de acuerdo a lo previsto, hay muchas posibilidades de que, junto con los Reyes, estrenen mañana, o pasado, el «Fortuna», que ayer seguía amarrado en su lugar habitual de Portopí tras haber navegado en la víspera, seguramente tratando de conseguir la puesta a punto definitiva.

La Familia Real pasa un día en es Trenc
Ayer, desde nuestro observatorio, cada vez más complicado por lo difícil que nos han puesto la visibilidad de la totalidad del barco, creímos ver que todos los miembros de la Familia Real "excepto el príncipe don Felipe, que se encontraba en Madrid" estuvieron a bordo del «Fortuna» visitándolo, pues salvo el Rey y su hijo nadie lo había visto por dentro. Bueno, sí, el Aga Khan y su esposa. A mitad de visita observamos cómo los duques de Palma se subían a la «Llamp», atracada a pocos metros del «Fortuna», y que una vez a bordo recibían de manos de la Reina a su hijo Juan Valentín. La lancha puso rumbo a es Trenc, donde estuvieron hasta media tarde.

Al rato de que la «Llamp» hubiera zarpado, en un monovolumen de color gris abandonaron el yate real los duques de Lugo, que según nuestras noticias habían llegado a Palma en la víspera. Por lo que tenemos entendido, la infanta doña Elena no va a navegar mucho en lo que le resta de embarazo.