TW
0

La primera tormenta del verano se saldó con unos índices de lluvia relativamente bajos y con fuertes rachas de viento, según los datos del Centro Territorial en Balears del Instituto Nacional de Meteorología.

Así, la tormenta, que apenas duró media hora, dejó 2'1 litros de agua por metro cuadrado en la zona de Porto Pi de Palma; 1'2 litros en la Serra de Alfàbia y un litro en el aeropuerto de Son Sant Joan y la zona de Sa Pobla. La tormenta, que comenzó sobre Palma y Calvià, se fue desplazando hacia el Nordeste de la Isla a la vez que perdía fuerza e intensidad por lo que el agua caída no servirá, en un principio, en nada para recuperar el caudal de los pantanos de la Isla. A día de ayer, según fuentes de EMAYA, el nivel del Gorg Blau y del Cúber apenas alcanzaba el 10'50 por ciento de su capacidad y contenían, únicamente 1'218 hectómetro cúbico de agua. El descenso de la cantidad de agua almacenada, (el mes pasado el nivel estaba al 18 por ciento), se debe, según las mismas fuentes, a la utilización del caudal sin que luego, por la falta de precipitaciones, sea repuesto.

Lo más destacado de la tormenta de ayer fueron, aparte de los rayos, los fuertes vientos que se registraron, vientos que, en el caso de la zona de Capdepera y la Serra de Alfàbia, alcanzaron los 80 kilómetros por hora mientras que en Palma la velocidad fue de 57 kilómetros por hora. Fuentes del Instituto aseguraron que el mal tiempo irá desapareciendo progresivamente durante este fin de semana pero que las tormentas con descargas eléctricas volverán a visitar la Isla a finales del mes de agosto.