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MICHEL'S
Apenas hace cinco años que Sant Elm ha recuperado su simulacro de
«moros y cristianos», pero nadie lo diría. Anteanoche, una multitud
se congregó en la playa para presenciar la batalla entre los
invasores turcos y los defensores andritxols. Es Firó de Sóller y
la Patrona de Pollença aún quedan lejos, pero sólo es cuestión de
tiempo. La comisión que trabaja todo el año para mejorar la fiesta
ha aportado ahora nuevos trajes para la tropa. Pero también ha
habido mejoras en la iluminación, los equipos de sonido y la
organización. Al ritmo de la narración de los hechos históricos,
explicados por Antoni Borràs a partir de un texto de Mateu Alzina,
los defensores de Sant Elm se encomendaron a su patrón, aunque
sabían de antemano que la partida estaba ganada de antemano. Así
fue. Un gran castillo de fuegos artificiales puso el punto final a
la fiesta.
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