En estos últimos días se están alcanzando en Mallorca las
temperaturas más altas de todo el verano, lo que unido al alto
nivel de humedad que se encuentra en el ambiente hace que la
sensación de calor asfixiante sea generalizada entre los ciudadanos
de la Isla.
Darse un chapuzón en la playa, en la piscina, tomarse una
horchata, o poner el ventilador a la máxima potencia no parecen ser
ya remedios suficientes para hacer frente a temperaturas como las
registradas ayer en toda la Isla. Como contraste, cabe señalar que
ayer en el Reino Unido granizaba y tuvieron temperaturas mínimas
que se acercaron a los 7 grados. La temperatura más alta se
registró ayer en Lluc, en donde se alcanzaron los 40'3 grados,
seguida de los 40 grados de Sa Canova, en sa Pobla. Otras
temperaturas destacables son los 37'3 grados de Porreres o los 35'2
de Pollença. En Palma, en el aeropuerto de Son Sant Joan, la
temperatura máxima fue de 34 grados y en Portopí de 33'6. En el
mismo Portopí, la humedad ambiental era del noventa por cien a las
20.30 horas.
Para hoy y mañana se espera un ligero descenso de las
temperaturas, y no se espera que el termómetro marque más de 35
grados en ninún lugar de la Isla. De cara al miércoles y días
posteriores se producirá un nuevo aumento de las temperaturas en
Balears. Como único incidente relacionado con la ola de calor que
estamos sufriendo, cabe señalar que los taxistas que tienen la
parada en Son Sant Joan boicotearon la cantina que hay en la zona
en la que estacionan debido, según señalaron, a la falta de aire
acondicionado y de condiciones sanitarias adecuadas.
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