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El año pasado debutó en la Pasarela Cibeles con unos conjuntos sobrios, en los que las transparencias, las aberturas y las flores fueron los ingredientes básicos de su colección. Este año va a más. Fruto de los acuerdos obtenidos entre una asociación de diseñadores de Balears y el Govern, Xisco Caimari tendrá la oportunidad de atravesar nuestras fronteras. Tras una nueva cita en Madrid, le esperan Nueva York, Pekín, Shanghai y París. La colección primavera-verano 2001 se conocerá entonces en muchos rincones del mundo.

"A la vista de este recorrido otoñal por distintos países, ¿crees que tu colección puede servir para homogeneizar tendencias distintas?
"Siempre que cambias de orientación geográfica los gustos difieren. El estilo de mi colección no variará para acoplarlo allí donde la presente. Es más una apuesta personal, una nueva experiencia. Me lo planteo como un juego, diseñar también es un juego. Eso sí, espero que la colección encaje en ciudades tan exóticas.

"¿Qué cambios has previsto en la nueva colección respecto de la que presentaste el año pasado en Cibeles?
"Fundamentalmente el color. En la edición anterior ya dejé entrever una evolución hacia el colorido. Mis colecciones las planteo como capítulos; cada una forma parte de un todo y son continuación una de la otra, sufren una evolución constante.
"¿Te consideras un discípulo de Victorio & Luchino?
"En parte, sí. Mi estilo difiere de Victorio & Luchino, aunque no renuncio a ellos porque me enseñaron la realidad de la moda. Está claro que ninguna escuela te puede enseñar esto hasta que no pones en práctica tus habilidades. Y yo aprendí que lo importante no es sólo el concepto exterior de la prenda. Las escuelas te enseñan la base, después debes evolucionar tú sólo.

"¿Existe un estereotipo ideal en el que pensar mientras se diseña un conjunto?
"Yo no pienso en un estereotipo, sino en alguien que pueda vestir mis diseños. Mi colección se dirige en su totalidad a las tiendas, no hago prendas para que se queden en pasarela. La ropa tiene que ser funcional.

"¿Para obtener reconocimiento, el diseñador tiene que renunciar a sus líneas personales?
"Te ves obligado a diseñar de determinada forma. Yo vivo de esto, no puedo hacer cuatro modelitos que no vayan a vestir a nadie. Aunque también si hago una colección y me piden conjuntos es porque coinciden con mi gusto.

"¿Ropa de invierno o ropa de verano?
"Me gustan las dos, no obstante la de invierno da más juego. Los conjuntos se componen de más piezas, lo que te permite jugar más. Y el juego me encanta, por eso también viajo, sirve de juego.