La isla de Cabrera fue declarada Parque Nacional Marítimo-Terrestre
hace diez años y, con motivo de esta conmemoración, el ministro de
Medio Ambiente, Jaume Matas, presentó ayer en Palma el Plan
Integral de Actuaciones y Ordenación de Usos, programa que prevé
una inversión de 1.000 millones de pesetas en tres años.
Este plan, que se llevará a cabo con fondos propios del
ministerio, es independiente de los 700 millones anuales que se
destinan para el mantenimiento del parque e incluye una serie de
actuaciones específicas para recuperar el entorno paisajístico de
la Isla, especialmente las áreas emblemáticas; la ordenación de
usos y actividades para mejorar la calidad de la visita y la
remodelación de los edificios e instalaciones existentes. Matas
remarcó, durante su intervención, que el programa de actuaciones no
implicará nuevas construcciones sino que el objetivo a conseguir es
la «recuperación de la imagen que tenía la Isla a principios del
siglo pasado» y, al mismo tiempo, mejorar las instalaciones para
que los visitantes «se encuentren más a gusto».
Las actuaciones se concentrarán, entre otros lugares, en el
puerto, campamento, muelle, playa, caminos y senderos y Faro de
Enciola. En este sentido el ministro del ramo recordó que, desde
hace 10 años, el parque nacional ha recibido 292.000 visitas,
120.500 en embarcaciones turísticas y el resto en embarcaciones
particulares unas cifras calificadas de positivas, especialmente,
señaló, «si tenemos en cuenta su carácter estacional ya que el 80%
de las visitas se produce entre los meses de mayo y septiembre.
Matas afirmó que se está estudiando ampliar el límite de visitas
diarias y del número de barcos que pueden atracar, aunque remarcó
que «aún no hay una decisión tomada» y recordó que la adopción de
esta medida corresponde a la Comisión Mixta, «hay que estudiarlo,
proponerlo y, si hay acuerdo, se llevará a cabo la ampliación».
Fuentes de Parques Nacionales aseguraron, en este sentido, que
Cabrera admite más visitas que las permitidas.
El Govern acusa a Matas de «poca altura moral y
política»
El Govern acusó ayer al ministro de Medio Ambiente, Jaume Matas, de
tener «poca altura moral y política» al no haber invitado al
Ejecutivo autonómico a la celebración del décimo aniversario de la
declaración del Parque Nacional de Cabrera. El portavoz del
Ejecutivo cree que la actuación del Ministerio de Medio Ambiente
«es partidista y de deslealtad institucional» y recordó que la
consellera Margalida Rosselló es la presidenta de la comisión mixta
que gestiona el parque de Cabrera.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.