Grupos turísticos alemanes han adoptado la decisión estratégica de
reducir sus cupos de camas y contratación de vuelos de Alemania a
Mallorca para el próximo verano hasta en un 25 por ciento, «ya que
quieren reducir riesgos y evitar las bajas rentabilidades que están
obteniendo este verano en la Isla», según ha constatado el
presidente del Fomento del Turismo de Mallorca, Miquel Vicenç.
Entre los grupos turísticos que ya han comunicado al Govern su
decisión de rebajar cupos de camas y recortar su programación de
vuelos se encuentra ITS-LTU, tal y como hizo el propio presidente
de este grupo, Dietmar Kastner, hace unos quince días en Palma al
propio conseller de Turisme, Celestí Alomar.
La Federación Hotelera de Mallorca, según su presidente Pere
Cañellas, «está al corriente de estos cambios que se están
produciendo en el mercado alemán porque se han encontrado con una
temporada 2001 compleja y muy difícil de comercializar en lo que
respecta a los cupos de camas contratados en Mallorca. Hay que
analizar este tipo de decisiones estratégicas, que, una vez más,
ponen de manifiesto la crisis por la que está atravesando el sector
hotelero que opera con el mercado alemán».
El Fomento del Turismo puntualiza que el resto de grupos
turísticos alemanes, después de la recesión de ventas de este año,
«van a recortar capacidades para reducir sus riesgos, así como
renegociar los contratos en garantía a la baja. Está claro que TUI,
Neckerman y resto de mayoristas alemanes con intereses hoteleros en
la Isla ajustarán al máximo toda su programación para obtener la
mayor rentabilidad posible, de ahí que oficialmente no comuniquen
ningún tipo de recorte para evitar problemas de daño de imagen del
propio destino turístico».
La patronal hotelera y el Fomento del Turismo han constatado
este verano un trasvase de capacidad hotelera contratada para el
turismo alemán hacia los mercados alternativos, «este
reposicionamiento del mercado es positivo, pero para ello deben de
funcionar los mercados alternativos. A nivel de rentabilidad, está
claro que los mercados latinos (portugués, italiano y francés) son
menos rentables que el mercado nórdico, pero los vaivenes del
turismo alemán y centroeuropeo debe de ser paliados con estos
mercados, aunque tengan un factor negativo, como su estacionalidad.
Más que un simple reposicionamiento se trata de una necesidad ante
lo que ha sucedido este verano y la fuerte competencia de los
destinos turísticos de la cuenca mediterránea oriental».
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