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El cisma entre la dirección de Gesma (empresa pública que gestiona los hospitales del Govern) y la cúpula directiva del Psiquiátrico desembocó ayer en el cese irrevocable de la subdirectora del área de salud mental y responsable del hospital, Alicia González; del coordinador de urgencias y agudos y ex director del centro, César Azpeleta; y del responsable de enfermos crónicos, Ovidio Fernández. Esta decisión, que en principio se pensó que podría ser reconducida, se adoptó a lo largo de una asamblea de trabajadores convocada por la propia Alicia González y en la que además de respaldarles se pidió la dimisión del director de Gesma, José María Carbonero.

Las causas del enfrentamiento, que ha desembocado en esta situación, responden a diferencias de criterios en relación al modelo organizativo (entre otras cosas de quién debe depender la Enfermería). La decisión de abrir ya las nuevas urgencias (hay quienes consideran que no reunen las condiciones adecuadas) parece que ha sido la gota que ha colmado el vaso. No obstante, hay quien apunta que detrás de esta decisión de dimisión en bloque hay intereses corporativos por el hecho de que Gesma haya decidido imponer a los psiquiatras turnos de guardia cuando hasta la fecha no se habían hecho.

Según ha podido saber este diario, la Conselleria de Sanitat ya se ha puesto a buscar repuestos al tiempo que se considera que hay un modelo y una reforma a llevar adelante que es lo importante y no las personas. A la asamblea "a la que se impidió el acceso de la prensa" acudieron más de medio centenar de trabajadores de todos los departamentos y al final de ella Alicia González declinó hacer declaraciones: «preguntadle a Carbonero», dijo. Los dimisionarios critican el talante del director de Gesma.

Suman y siguen las dimisiones en el Psiquiátrico
Las dimisiones irrevocables de Alicia González, César Azpeleta y Ovidio Fernández al frente del Hospital Psiquiátrico se suman a la destitución de Ricard Carretero hace menos de un mes. Un psiquiatra fichado a mediados del año pasado para hacerse cargo del hospital (subdirector del área de salud mental de la empresa pública Gesma) y que antes de ser destituido fue 'apartado' a Manacor. Además, se da la circunstancia que Carretero ya había sustituido en el mismo cargo a otra persona, Antoni Rifà, quien también dejó el puesto. Tras Carretero se nombró a Alicia González.