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La fuerte niebla causó ayer dos desvíos de aviones y 15 retrasos de hasta 3 horas y media en el aeropuerto de Son Sant Joan, seis cancelaciones en el aeropuerto de Eivissa -entre entradas y salidas- y otros dos retrasos de una y dos horas en operaciones con llegada al aeropuerto de Maó, según informó Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea, AENA-Palma. Debido a las diferentes capacidades de las aeronaves y a causa de los diversos grados de ocupación en sus asientos, a AENA le resulta difícil estimar los pasajeros afectados por esta nueva jornada de niebla en Balears, que podrían ser unos 3.000. En la jornada de hoy pueden repetirse estos problemas porque las previsiones meteorológicas indican que la mañana volverá a ser neblinosa.

A las 21.00 de la noche del martes, cuando la niebla ya era densa en algunos puntos de Mallorca, AENA activó el plan de baja visibilidad (ILS) de Son Sant Joan. Pese a ello, hasta la 01.00 de la madrugada dos vuelos de Iberia procedentes de Barcelona y Madrid regresaron a sus aeropuertos de origen, al no poder aterrizar por la baja visibilidad registrada en las pistas de Son Sant Joan. La decisión de aterrizar o no hacerlo corresponde al piloto, que decide en función de sus aptitudes (calificación) y de si la aeronave está homologada técnicamente para utilizar el sistema de baja visibilidad ILS nivel 2.

A partir de la mañana de ayer todos los vuelos programados para salir de Son Sant Joan lo hicieron sin excesivos retrasos -excepto uno con destino Eivissa-, aunque quince operaciones de llegada registraron importantes demoras de hasta tres horas y media para vuelos procedentes de Eivissa, Menorca y Barcelona. Los vuelos interislas fueron los más afectados por los retrasos. Son Sant Joan recuperó la normalidad al mediodía de ayer, aunque a las 13.00 todavía se registraban retrasos de más de una hora en dos vuelos internacionales procedentes de aeropuertos alemanes.

Por otra parte, entre las 8:15 y las 9:15 de ayer se cancelaron cuatro vuelos de salida en el aeropuerto de Eivissa, un Iberia con destino Barcelona, un Spanair con destino a Madrid y dos Air Nostrum con destino Palma. Por otra parte, dos vuelos procedentes de Valencia y Palma tampoco salieron de sus aeropuertos de origen a causa de los problemas de visibilidad. Menos problemática resultó la jornada matinal en el aeropuerto de Maó donde sólo se registraron dos retrasos de importancia en conexiones con Palma, con demoras de entre una y dos horas.

El sistema ILS es un sistema de aterrizaje de precisión por instrumentos que permite a las aeronaves tomar tierra en condiciones meteorológicas de baja visibilidad. Existen diferentes niveles de ILS, la categoría 1 permite el aterrizaje con visibilidad igual o superior a 800 metros en pista, mientras que la categoría 2 -sistema con el que cuenta Son Sant Joan- permite hacerlo con visibilidad igual o inferior a los 400 metros. Navegación aérea dice que pese al límite de 400 metros, la mayoría de compañías aéreas no aterrizan con visibilidad inferior a 500 metros por causas técnicas de sus modelos de avión, caso de los dos aviones que regresaron ayer a sus aeropuertos de origen.

«En su plan de inversiones aeroportuarias, AENA tiene prevista la instalación del sistema ISL-3 en Son Sant Joan, aunque para su utilización no basta con que el aeropuerto cuente con esa infraestructura, sino que tanto avión como tripulación necesitan una certificación técnica para utilizarla. Además, este sistema requiere cambios importantes en la operatividad del aeropuerto, existen áreas sensibles en forma de zepelin, en las que no se puede mover nada ni nadie mientras un avión lo utiliza», afirma Navegación Aérea. «A partir de mayo se instalará este sistema en Son Sant Joan para después empezar un estudio para conseguir la homologación del aeropuerto, a partir de ahí las compañías aéreas deberán certificar tanto a sus aviones como sus tripulaciones para que puedan utilizarlo».