El soldado de la Comandancia General de Balears Alberto Doménech estaba realizando una patrulla en la zona de Cabo Blanco cuando se encontró en el suelo un ejemplar de águila Calzada mojada y con seis plumas primarias del ala izquierda cortadas. El soldado, junto con el brigada Jose Luis Montejo, consiguieron colocarle una chaqueta encima y la salvaron de una muerte segura.
La Fundación Natura Parc se encargó de recuperar el ave con un implante de las plumas cortadas y con quince días en un voladero de musculación. Ayer por la mañana, el águila Calzada volvió a volar, justo en el mismo lugar donde fue encontrada hace un mes malherida.
«Balears es uno de los lugares donde estos ejemplares viene a reproducirse. En España puede haber cerca de 2.000 parejas reproductoras, pero es una especie que se encuentra en peligro de extinción», afirmó Cati Cortés, bióloga y jefe del departamento de Educación Ambiental de la Fundación.
«Se le ha colocado una anilla con sus datos. Los últimos seis animales que han entrado en el Centro de Recuperación de Fauna Salvaje han sido recuperados. El martes daremos al Consell de Mallorca dos lechuzas para eliminar las ratas de la Dragonera», añade Toni Mas, presidente de la Fundación.
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