TW
0

Las principales cadenas hoteleras de Balears -Sol Meliá, Riu, Iberostar y Barceló- asumen que la temporada de verano «no es recuperable» en relación a los niveles de ocupación registrados en años anteriores. Todas aceptan que tendrán que recurrir a descuentos y ofertas para estimular las ventas -excepto Barceló- e, incluso, Sol Meliá y Riu afirman explícitamente a estas alturas que reducirán sus beneficios en Balears respecto 2001. «Durante este verano ya no nos recuperaremos», afirma Gabriel Escarrer, presidente del grupo Sol Meliá. «Lo poco que podamos recuperar a partir de ahora será a base de descuentos, por lo que, en cualquier caso, reduciremos nuestros beneficios en las Islas», señaló.

Escarrer se lamentó de la actual situación de «divorcio» entre Govern y sector turístico, «es incomprensible que hayamos llegado a este malestar y crispación entre el Ejecutivo Autonómico y el sector turístico que es que tira del carro de la economía balear». Desde Iberostar, grupo presidido por Miquel Fluxà, afirman que «las previsiones para el verano se mantienen con un diferencial significativo respecto al año anterior, aunque igualmente registramos un aumento sensible en las ventas de última hora, lo cual dificulta hacer previsiones certeras».

En todo caso el grupo asume que la temporada se moverá en niveles inferiores al ejercicio 2001, «evidentemente las cartas para este verano están prácticamente echadas, sin posibilidad alguna de grandes cambios de rumbo. Mantendremos el máximo contacto con la totalidad de los touroperadores para generar el máximo números de reservas posible, aunque nos esforzaremos en prestar servicios de calidad para asegurar que el cliente perciba, en todo momento, que en Mallorca seguimos ofreciendo vacaciones con una buena relación entre calidad y precio».

En el mismo sentido, Riu Hoteles asume la necesidad de recurrir a los descuentos de última hora «para conseguir ocupaciones aceptables, especialmente en el mercado alemán, que es el que peor responde». La cadena acepta también la reducción de su actividad durante el verano y que «por segundo año consecutivo» reducirán sus beneficios en las Islas. Finalmente, el Grupo Barceló es el único que manifiesta su voluntad de evitar bajar sus precios pese a las presiones de los touroperadores. «Estamos intentando no reducir nuestros precios, hay calidad suficiente, porque a la larga puede ser contraproducente», dicen.

Las cadenas hoteleras de Balears constatan la reducción de la actividad de sus establecimientos durante esta Semana Santa, lo que imputan, en alguna medida a lo prematura que ha caído respecto a años anteriores y a la atonía en la contratación de reservas en los mercados europeos. «La Semana Santa cae muy pronto este año, por lo que muchos hoteles no tenían previsto abrir. En todo caso nuestros establecimientos que están operativos registran ocupaciones aceptables, pero hemos tenido que recurrir a descuentos concretos para obtenerlas», afirma Iberostar. En el mismo sentido, Riu dice que sus ocupaciones registran un descenso del 10 por ciento respecto a 2001.