Ayer concluyó, con la Gran Diada para violinistas, violistas, violonchelistas y contrabajos, la V Trobada de Joves Violinistes de la Mediterrània, organizado por la Associació El Meu Violí, que se ha celebrado durante toda la semana con la participación de músicos de alto nivel. Los niños y niñas amantes de la música y del violín, acompañados de sus familiares, llenaron ayer de buena música el Acolliment de la explanada del monasterio de Lluc con el gran concierto de clausura. En total han participado unos 300 niños, ya que a los 250 violinistas se han añadido este año otros instrumentos de cuerda.
El encuentro, que se inició el pasado lunes en la Casa de Cultura de Palma con la exposición de «Lutheria Contemporània: Instruments i arcs del segle XX», tuvo su punto más álgido este fin de semana. El viernes se ofreció un cariñoso homenaje al maestro violinista Ignasi Pinya Tarongí, fundador del Conservatori de Música i Dansa de Palma, con el concierto de violín y piano a cargo de Ramón Andreu y Albert Díaz. El sábado se desarrolló el Gran Concierto de Gala con los violines solistas de Teresa Ripoll, Caterina Cladera, Magdalena Ramon y Xavier Pericàs. El acto más esperado de toda la jornada fue el concierto de clausura celebrado ayer y en el que los niños demostraro sus cualidades para la música. Distintos grupos, divididos en diferentes niveles, se dieron cita para interpretar una serie de piezas. El acto concluyó con un recital en el que tomaron parte los participantes.
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