TW
0

La Conselleria de Salut y Consum y los sindicatos integrantes de la mesa de sanidad "CESM, SATSE, SAE, CC OO, UGT y CSI-CSIF" llegaron ayer a un acuerdo de homologación laboral para los siete mil funcionarios transferidos del Insalud y del Serbasa, que incluye la ampliación de la plantilla y la aplicación de la jornada de 35 horas semanales a partir de 2004. La consellera de Salut i Consum, Aina Salom, aseguró que este pacto beneficiará también «a los 800.000 usuarios de la sanidad pública en Balears» y contribuirá a la racionalización del «uso de las técnicas y tecnologías, incluida la prescripción de medicamentos».

Salom manifestó ayer su satisfacción por haber logrado un acuerdo en la mesa sectorial de sanidad, «tal y como nos propusimos el pasado 27 de diciembre tras asistir a la última reunión en la que decidimos asumir las transferencias sanitarias». La aplicación de todo lo especificado en el acuerdo afectará al personal estatutario transferido del Insalud y a los funcionarios del antiguo Serbasa, entre otros, y con él se pretende la estabilidad laboral y la elaboración de un estatuto propio antes del final de la legislatura. La consellera explicó que el nuevo convenio fija la jornada laboral en 35 horas semanales a partir de enero de 2004 y que, desde enero de 2002, los trabajadores gozarán de siete días de licencia.

Según el acuerdo, el servicio de salud incrementará las plantillas a fin de adaptarse al importante crecimiento demográfico y en este año se prevé que el aumento sea de unas 500 plazas. El incremento salarial se producirá, dependiendo de la categoría del profesional, desde un 12'01 para los facultativos hasta un 30'78 por ciento para los celadores, respecto al salario del Insalud, según explicó Salom. La consellera señaló que los objetivos compartidos en el acuerdo de ayer son «garantizar una asistencia sanitaria de calidad para la población y una continuidad asistencial entre los diferentes niveles (atención primaria, especializada y sociosanitaria), además de la cooperación entre los centros».

Además, se pretende contribuir a la racionalización en el uso de las técnicas y las tecnologías basándose en la evidencia científica, incluida la prescripción de medicamentos. Resolver con agilidad los problemas de salud de los ciudadanos y orientar los servicios al usuario mejorando su accesibilidad, además de considerar la formación de los profesionales como un elemento que garantice la mejora continua de la calidad asistencial son otros de los objetivos del pacto.

La homologación salarial ha sido cuantificada en 8 millones de euros, tal y como explicó Aina Salom acompañada del director general de Planificació, Pablo Rivero y el gerente del IB-Salut, Juli Fuster. Todos los representantes sindicales hablaron de «satisfacción» por el acuerdo, tal y como indicó Mateu García de CSI-CSIF, «éste es un buen acuerdo» o Manel García de CC OO quien manifestó que desde el IB-Salut y la Conselleria de Salut «se nos ha mostrado una nueva forma de hacer las cosas». Para Miguel Herranz de la Federació de Serveis Públics de UGT «desde nuestro sindicato estamos muy satisfechos con la aprobación de este acuerdo de homologación que recoge buena parte de nuestras propuestas».