Antich, junto a Sampol, Mesquida, Alomar y Grosske, se reunió con la cúpula de la CAEB. Foto: T.AYUGA.

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Govern y la patronal CAEB, después de más de seis meses sin mantener un encuentro oficial, se reunieron ayer en el Consolat de la Mar por espacio de dos horas para analizar la actual situación económica por la que atraviesa Balears, así como el último informe de coyuntura de la patronal que provocó la pasada semana un cruce de opiniones contrapuestas. El vicepresidente Pere Sampol y el presidente de la CAEB, Josep Oliver, anunciaban a los medios de comunicación la decisión de colaborar para frenar y paliar el proceso de desaceleración que padece la economía balear y la industria turística.

En el encuentro estuvieron presentes Francesc Antich, Pere Sampol y los consellers Joan Mesquida, Celestí Alomar y Eberhard Grosske. Por parte de la CAEB, a parte de Josep Oliver, los presidentes de las distintas asociaciones, entre ellos José Luis Guillem, Pau Bellinfante, Bartomeu Servera, Carlos Moyá, Bartomeu Bestard y María Antonia Gual, así como la gerente de la CAEB, Isabel Guitart. No hubo representación alguna de la Federación Hotelera de Mallorca, circunstancia que minimizó el propio Oliver.

El vicepresidente Pere Sampol indicó que hay que «lanzar un mensaje en positivo a la sociedad balear, dado que pese al actual proceso de desaceleración seguimos creciendo, pero en unos niveles inferiores a otros años. Balears está preparada para salir de esta coyuntura porque tenemos una de las economías más sólidas de Europa». Oliver apuntó que en ningún momento la CAEB habla de crisis, «es un término que utilizo por vez primera. Estamos inmersos en una desaceleración y no hay que magnificarla. Vamos a colaborar con el Govern, cada uno en lo que le corresponde, para paliar esta coyuntura y frenarla».

Si hubo un factor que modificó el talante critico de la CAEB contra el Govern, fue la decisión del Ejecutivo autonómico, a través de Francesc Antich y del propio Pere Sampol, «de indicar que el Govern no está en contra del turismo ni de que se incremente el número de turistas. Esto para nosotros es un cambio sustancial e implica una gran satisfacción por lo que ello representa», afirmó Oliver. Sampol puntualizó en este sentido: «Se ha transmitido la imagen en el exterior de que el Govern está en contra del turismo, cuando se trata de una actividad que más respeta el medio ambiente y preserva el paisaje protegido. Tenemos un problema de imagen en el exterior y hay que contrarrestarlo explicando que ningún destino presenta una mejor relación calidad-precio y que el Ejecutivo no sólo no reniega de la actividad turística, sino que cree que es y ha de ser el principal motor de nuestra economía y de nuestros otros sectores económicos».

El vicepresidente del Govern, asimismo, calificó de «desafortunada» una campaña de origen desconocido en los medios de comunicación locales en la que se culpa al Ejecutivo de la mala temporada turística. «Esto no ayuda a nada a superar la difícil situación turística», comentó Sampol. Ambos reconocieron que a partir de ahora se iba a entrar en una dinámica de colaboración en diversos temas, principalmente en los que tengan relación con campañas que tengan como objetivo revitalizar la imagen de Balears como destino turístico.