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MARÍA MARTÍN Los payeses de Mallorca invitan a la población a consumir sandías y melones mallorquines para salvar la temporada. Y es que según explican Guillem Adrover y Guillem Llull, dos payeses de Manacor y el coordinador del sindicato agrario Unió de Pagesos, Joan Mas, «este año estamos ante una campaña excelente ya que tanto las sandías como los melones son de una calidad extraordinaria». A pesar de todo, según estos dos payeses «este año a consecuencia de que por primavera llovió abundantemente e hizo frío, los melones y las sandías más tempraneras se han juntado con las que crecieron más tarde. De hecho se han llegado a juntar las tres cosechas y eso, junto con una caída del consumo ha hecho que a estas alturas se dé un importante excedente de esta fruta».

A esta circunstancia, siempre según explican Adrover, Llull i Mas, se ha añadido que las plantas de melones y sandías de regadío han producido más que otros años con el mismo riego.Y es que las lluvias de la primavera dieron a la tierra una humedad interior muy beneficiosa para el cultivo en zonas de tierra fina como la de los pueblos que rodean Manacor. De hecho dentro de las 15 hectáreas de sandías que tiene sembradas Guillem Adrover en la finca de Son Peroti y Es Mas, prevé recoger entre 500 y 600 toneladas de esta fruta mientras que el año pasado la producción fue de un 20 por ciento menos. Por lo que se refiere al melón de secano, que se cultiva en pueblos como Petra o Vilafranca, la cosecha es tan extraordinaria como la de regadío.

Por su parte Joan Mas indica que «la bajada de consumo de estos productos, cultivados en Mallorca, está muy relacionada con la reducción del número de extranjeros que se registra en la isla; el hotelero es un buen cliente y si no hay gente no hay consumo. Pero también tiene mucho que ver la cantidad de melones de regadío que llegan de la península, especialmente de las proximidades de la Mancha, que inundan el mercado mallorquín con unos precios bajos». Mas y los dos payeses explican que «el melón peninsular no es tan bueno como el de Mallorca que se come apenas se coge».