Imagen de archivo de una promoción de productos baleares en una gran superficie comercial.

TW
0
J. J. SERRA/R. L. La Conselleria d'Economia, Indústria i Comerç está tramitando, correspondientes al 2001, un total de 25 expedientes de solicitudes de grandes establecimientos comerciales que suman una superficie total de 20.000 metros cuadrados. La directora general de Comerç, Antònia Allés, explica que «de momento, de los 25 expedientes del 2001, 15 ya han llegado al Consell Assesor de Comerç, que ha emitido informe favorable en 14 casos, todos ellos supermercados, de los 15 mencionados. Las 14 peticiones que han sido aceptadas suman 7.825 metros cuadrados».

La única solicitud denegada corresponde a una empresa que quería instalar un supermercado en la barriada del Camp Rodó, en Palma, con una superficie de 1.227 metros cuadrados. Esta extensión se ajusta a los límites establecidos por la moratoria de grandes superficies comerciales, pero Allés recuerda que «el Consell Assesor de Comerç puede rechazar un proyecto si considera que perjudicaría al sector comercial de la zona allí donde quiere instalarse, y en el caso del Camp Rodó así se consideró».

Como se recordará, en aplicación de la moratoria actualmente vigente, la Ley de Comercio establece los siguientes límites de superficie en los grandes establecimientos comerciales en función de la población de cada municipio: menos de 3.000 habitantes, hasta 250 metros cuadrados; entre 3.000 y 10.000 habitantes, hasta 400 metros cuadrados; entre 10.000 y 20.000 habitantes, hasta 600 metros cuadrados; más de 20.000 habitantes, hasta 800 metros cuadrados; y en Palma, como caso específico, no pueden superarse los 1.300 metros cuadrados.

Además, todas las empresas que quieran abrir un nuevo gran establecimiento comercial en las Islas están obligadas a pedir una licencia al Govern y pagar una tasa autonómica si, a nivel general, cuentan con más de 250 trabajadores y facturan más de 40 millones de euros anuales (6.655 millones de pesetas). La tasa está fijada en 30 euros (5.000 pesetas) por metro cuadrado. Entre las solicitudes de ampliación denegadas por la Conselleria que dirige Pere Sampol se encuentra, por ejemplo, la tienda de muebles Ikea, que cuenta con una superficie comercial en Palma de 3.568 metros cuadrados y ha pedido este año en la Conselleria d'Economia, Indústria i Comerç una ampliación de sus instalaciones con otros 1.300 metros cuadrados. El departamento autonómico denegó la ampliación solicitada por la conocida empresa sueca y ésta presentó un recurso administrativo que ha sido igualmente rechazado.

En aplicación de la Ley de Comercio, el Govern ha llegado además a un acuerdo con las entidades financieras de las Islas para que no ofrezcan productos comerciales en pago de intereses. La ley prohibe a bancos y cajas de ahorro que, por imposiciones monetarias, ofrezcan productos comerciales en pago de intereses. La ley también prohibe a las entidades financieras que vendan productos a plazos a través de una financiación específica. En una reunión mantenida con Sampol, los representantes de bancos y cajas de ahorro acordaron retirar estas ofertas desde el pasado 1 de julio.