Binissalem ya tiene a los representantes de las fiestas del Vermar 2002. La noche del pasado sábado se celebró, en la piscina de Can Arabí de la localidad, la tradicional votación para escoger los vermadors de las fiestas de este año.
Además de representar al pueblo y presidir, junto a las autoridades locales, los actos organizados con motivo de las fiestas del Vermar, los vermadors son los encargados de desplazarse hasta Palma para invitar a las principales autoridades autonómicas a visitar Binissalem durante el Vermar.
Antiguamente, la comisión de fiestas era la encargada de elegir los chicos y chicas que hacían de vermadors majors. Sin embargo, desde hace poco más de una década, la democracia ha vencido a la tradición y los chicos que protagonizan el Vermar son elegidos por el pueblo. Eso sí, no por todos los habitantes sino sólo por los jóvenes que tienen edades comprendidas entre 14 y 25 años.
Los únicos requisitos existentes para presentarse a la candidatura de vermador o vermadora son estar empadronado en Binissalem y tener 16 años. Así, los elegidos en esta ocasión pertenecen a la quinta del 86.
Por primera vez en la historia del Vermar, en esta ocasión se presentaron más candidatos a vermadors que candidatas a vermadores. En total, ocho chicos optaron a los dos títulos, mientras que sólo cinco chicas se presentaron al reservado a las mujeres de la localidad.
La votación, en la que participaron cerca de 200 personas, otorgó el título de vermadora major a Joani Alcaraz Llabrés, que obtuvo 127 votos. Marta Fiol Crespí y Cristina Jaume Batle fueron elegidas segundas vermadores, con 117 y 98 votos, respectivamente.
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