El servicio balear de Salud, Ib-salut, se ha marcado como uno de
los objetivos prioritarios igualar al máximo la estancia media en
los hospitales del resto de centros sanitarios del Estado
Español.
El director asistencial del Ib-salut, Luís Alegre, explicó que para
obtener una atención sanitaria de calidad tiene que garantizarse a
los pacientes que «estarán ingresados en el hospital el menor
tiempo posible».
Por eso, en los recientemente firmados contratos de gestión,
cada hospital de las Illes Balears asume una estancia media de
hospitalización según las especialidades que se compromete
alcanzar.
Para marcar el baremo de cada uno de los hospitales se toma la
media estatal y si el centro en cuestión tiene un registro medio en
el conjunto del Estado, se fijan como espejo los centros que
presentan una mejor media y que tengan unas características
parecidas.
De esta manera, So Dureta presenta como estancia media en 2004,
7,54 días, mientras que en 2003, la estancia media en este hospital
era de 7,95 días. Alegre destacó la voluntad de volver a situar a
Son Dureta entre los 20 mejores hospitales del Estado.
Por su parte el hospital de Manacor ha experimentado un ligero
incremento en la media y ha pasado de los 6,92 a los 6,94 días que
se requieren este año. El aumento más notable es el que ha sufrido
Son Llàtzer, que ha pasado de los 6,72 días por término medio que
pasaba un paciente en este centro en 2003 a los 7,78 que pasa en
2004. Esta subida de la estancia de los enfermos se debe a la
«paulatina incorporación de servicios para dar respuesta a su
población de referencia» que ha ido experimentando el hospital
desde su inauguración.
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