El presidente autonómico de Creu Roja, Miquel Alenyà, y el director
de Caja Madrid en Balears, Alfredo Lopera, anunciaron ayer la
renovación del acuerdo de colaboración por el que la entidad
bancaria aportará 22.800 euros para el proyecto «Bola de Nieve»,
desarrollado por toxicómanos activos y dirigido a este mismo
colectivo.
El aumento de la financiación de Caja Madrid (el año pasado
aportó 6.000 euros) permitirá ampliar la atención a trabajadores y
trabajadoras del sexo, independientemente de que su problemática
esté o no asociada al consumo de drogas, así como a adictos a
sustancias diferentes a la heroína y la cocaína, como hasta
ahora.
Alenyà explicó que «Bola de Nieve» es una iniciativa de Creu
Roja en Balears que se puso en marcha en noviembre de 2002, con una
subvención de 6.000 euros de Caja Madrid, y fue uno de los seis
programas seleccionados por el Ministerio de Trabajo y Asuntos
Sociales como una experiencia de «Buenas prácticas de inclusión
social a nivel estatal».
El programa, concretó, «está dirigido al colectivo de
toxicómanos que quedan fuera de la red de asistencia social», a los
que definió como «personas invisibles».
La directora autonómica de Intervención Social de Creu Roja,
Marta Soler, apuntó que «este año espera llegar a una población de
300 toxicómanos, de los que se confía en formar a 53 por
especialistas de Cruz Roja, de los que al menos 15 se convertirán
en agentes de salud». El perfil del usuario de este programa el año
pasado era el de un hombre de 34 años, adicto a la heroína o la
cocaína y con una economía precaria.
A la presentación asistieron, además, la coordinadora del centro
de toxicómanos de Sa Placeta, Marga Santana, y el director de la
Oficina de Caja Madrid en las Islas, Carlos Mayoral.
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